viernes, 29 de junio de 2012

ORGULLO Y PREJUICIO


La otra noche en mi dormitorio mientras disfrutaba de una de mis películas favoritas, no dejaba de pensar en como las personas, hombres y mujeres (no siendo la excepción), siempre mostramos en determinadas ocasiones y situaciones, un orgullo desmedido y prejuicios injustificados a la hora de tratar y conocer a los demás, ’Esta entrada va dedicada a todas esas personas que piensan que son la última ‘’C-C’’ del desierto’’.

Orgullo y Prejuicio de 2005, es una película basada en la novela de la británica Jane Austen publicada en 1813, donde el tema central es el orgullo de clase de Darcy y los prejuicios de Elizabeth (personajes centrales de la obra) y como estos deben crecer como individuos y aprender de sus errores para poder enfrentarse al mundo en común que le rodea.

Volviendo a nuestra realidad, podemos ver como en la actualidad aplicamos esta misma fórmula en las relaciones con los demás, no es el simple hecho de conocer a alguien, es como nos empeñamos después de esto, de poner un tempano de hielo y un océano por medio que evita el acercamiento hacia este. Incluso antes de conocer a alguien ya estamos lanzando criticas sin saber que tal es.
Muchas son las excusas que buscamos para justificar nuestra forma de actuar y pensar, pero, ¿son razones suficientes que nos amparen al momento de estar frente al banquillo de los acusados?, entre las mas nombradas están; ‘’que tiene un determinado color de piel, que no es aparente, que es de tal clase social, que es gordo o flaco, que no viste adecuadamente, que no piensa igual que yo, que no es inteligente, hasta que tiene cierta inclinación sexual diferente a la nuestra’’, son algunas de los pretextos que buscamos para dar un trato diferente a un compañero de trabajo, alguien que conocemos en la calle, amigos y hasta algunos miembros de nuestra familia.

Sin duda alguna, nos hemos convertido en seres superiores, en vez de personas con las cuales se puede compartir y tener empatía.

Antes de lanzar cualquier pensamiento sobre alguien, primero debemos pensar que en la manera que juzgamos seremos juzgados, en igual o mayor medida, que quizás, los defectos que buscamos en los demás son insignificantes en comparación con los nuestros. Debemos ser un poco mas receptivos con las personas que se nos acercan en condición de igualdad y sin ninguna mala intención, ya que resulta gratificante después de conocer a alguien y tratarlo más de cerca, el darnos cuenta que los pensamientos infundados que teníamos hacia este, eran totalmente diferentes e irrelevantes, pero si seguimos con ORGULLO Y PREJUICIO, estamos perdiendo un preciado tiempo en tener tal vez a un ser especial y valioso en nuestra vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario