Amor al Sexo

En nuestra sociedad todavía se tiene la idea, de que el sexo es un acto indebido del cual debemos avergonzarnos y sentir remordimiento a la hora de practicarlo. Desde antes de nacer ya somos concebidos con muchos tabúes y prejuicios, que son desarrollados en el transcurso de nuestra vida e impiden desarrollar de una forma plena, segura y con toda libertad nuestra vida sexual.

La manera de pensar respecto al sexo se tergiversa mucho hoy en día, los expertos  en el tema sugieren; que la única manera de romper con estos esquemas es conversando sin vergüenza, y llamándolo tal y como es, ¿Por qué nos da tanto miedo esta palabra?, de solo pensar en la misma, nos hacemos la idea de que somos juzgados sin haberla pronunciado. Podemos hablar de economía, arte, ciencia y otros, los cuales nos convierten en personas cultas y civilizadas, pero no podemos tener una mente más abierta y hablar de un tema esencial como lo es la sexualidad, vemos que este asunto esta relegado solo para los sexólogos (profesionales que hablan abiertamente al respecto), pero que hay de nosotros, es un tema que debemos adoptarlo como también abórdalo.

En países desarrollados  es un tema de lo más normal en una conversación, en nuestro país es sinónimo de silencio en una conversación. Se podría decir que hablar de sexo va de la mano con el desarrollo de un Estado. En USA, Inglaterra, Brasil, Canadá, países desarrollados las libertades de expresión en cualquier tema son aceptados, incluyendo EL SEXO, es sin duda de que en estas regiones, la amplia educación que reciben los individuos, les permite ver mas allá de los pensamientos estrictos y limitados de que gozamos en nuestro país. En la generación actual se ve un poco más abierta la idea, solo un poco, esto gracias a la gran exposición mediática en la que se ven envueltas figuras que hablan abiertamente sobre el mismo y que nuestros jóvenes están adoptando, aunque tal vez no con el mejor de los ejemplos.

 Pero, ¿Hablar de sexo nos convierte en personas con una mala moral y falta de educación?, debemos primero establecer que la sexualidad es moralmente algo de lo cual no debemos sentir vergüenza y en segundo demostramos ser educados y estar informados cuando hablamos abiertamente y sin temor al que dirán.

 Sin embargo, tenemos otra idea que nos inculcan desde pequeños, ¿Hablar de sexo nos convierte en personas que se comercian a través del mismo (cuero, gigoló, un prostituto(a) y sus derivados), será cierto?, ese pensamiento es tan hipócrita en nuestros días, queremos pretender ser mas Papitas que el Papa, en cualquier lugar a todos nos gusta estar dentro y escuchando este tipo de conversación, simplemente es la condición humana que nos gusta y atrae del sexo y también el morbo, que sin duda alguna, es parte de la educación moralista de cualquier cultura.

A pesar de estar en el siglo XXI, podríamos decir que aún estamos en la época VICTORIANA (reinado de la Reyna Victoria de Inglaterra 1837-1901), La sociedad de la época estaba exacerbada de moralismos y disciplina, con rígidos prejuicios y severas interdicciones. Los valores victorianos se podrían clasificar como "puritanos" destacando en la época los valores del ahorro, el afán de trabajo, la extrema importancia de la moral, los deberes de la fe y el descanso dominical como valores de gran importancia.

Por no hablar y tenerle vergüenza a algo que es una necesidad y condición humana, es que en nuestra sociedad se reflejan los embarazos a destiempo y no deseados, enfermedades de transmisión sexual, y otros actos atroces que son producto de la falta de EDUCACION e INFORMACION en el individuo respecto al tema.

El sexo es un acto que da paso al frenesí de las emociones humanas, de los deseos reprimidos por una sociedad moralista y llena de prejuicios, es un acto en donde dos personas no importan la edad, sexo, raza y clase social, desembocan en la razón de ser y por la que venimos al mundo. En mi opinión, hablar y tener sexo no implica dar un mal ejemplo a la sociedad, somos libres de hacerlo, siempre y cuando actuemos con responsabilidad a la hora de practicarlo.  ¿Qué, con quien, cómo, donde y por qué?,  solo nos concierne a nosotros a nadie más, Amor al Sexo.